Podemos decir que la frecuencia o vibración índigo representa nuestro
siguiente paso evolutivo. Por tanto, todos tenemos la posibilidad de
acceder a esta frecuencia y es por esto que cada vez llegan a nuestro
planeta tierra más niños vibrando en esta frecuencia que toma su nombre
por su color azul índigo.
Esta es básicamente una frecuencia de ruptura, viene a acabar con
sistemas que ya resultan caducos porque no nos permiten seguir
avanzando.
El primer sistema que vienen a reformar o equilibrar a nivel personal,
es el familiar, después el sistema educativo y el médico,
principalmente.
Por todo esto, los niños índigo tienen una gran misión, tanto a nivel
personal como a un nivel colectivo. A continuación presento algunas
características para reconocer niños índigo según esta teoría:
Tienen ojos grandes y una mirada expresiva, profunda. A veces pueden tener el lóbulo frontal un poco abultado.
Son muy intuitivos.
Son sensibles. Perciben lo que ocurre a su alrededor y las emociones de
las personas que los rodean. Y cuando no están de acuerdo con la actitud
de la persona, utilizan esto más como un elemento para confrontarla con
su verdad, en vez de simpatizar con ella.
Son empáticos y solidarios. No son competitivos.
Sienten que merecen respeto.
Saben cuál es su misión.
Se rebelan ante lo injusto o arbitrario, por esto a veces suelen tener problemas con las figuras de autoridad y la disciplina.
Son muy creativos.
Se aburren fácilmente.
Es común que sean diagnosticados con TDA o TDAH.
Son líderes.
No responden ante la manipulación o la culpa.
Necesitan convivir con otros niños índigo ya que se aíslan frente al rechazo o la falta de identificación con sus semejantes.
Pueden ser zurdos o ambidiestros ya que confían en las cualidades de su hemisferio derecho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.