A menudo pensamos en las emociones como
originarias y residentes en el corazón, y la Unakita puede calmar el
Chakra Corazón, pero otro lugar donde residen las emociones, a menudo
encarceladas, está en el plexo solar, también considerado el “segundo
corazón”.
Como niños pequeños a los que se les ha
desalentado de expresar plenamente sus emociones, nos enteramos de que
la respiración superficial nos ayuda a no sentir tanto el impacto de
esas emociones. La represión de los sentimientos puede ser automática, y
así la vida, aunque tal vez menos dolorosa, también tiene menos
alegría.
Puede ser muy útil para la liberación
constante de sentimientos largamente retenidos. Con sus tonos de en un
coral opaco y de color verde oliva (dos colores asociados con el plexo
solar), la Unakita consta de tres minerales: Feldespato, epidoto y
cuarzo. Cuando uno se apoya en la autoestima y la profunda conciencia de
sí mismo, es más fácil que los viejos sentimientos surjan de modo que
puedan ser liberados de nuestro interior.
Presta un elemento más a la
auto-conciencia. En el trabajo con esta piedra la gente se ha dado
cuenta de que eran capaces de ir más allá de los síntomas físicos de una
enfermedad y la comprensión de las fuentes mentales y emocionales de
ella. También se cree que ayuda a liberarse de los condicionamientos que
han inhibido tu crecimiento personal.
Rectitud que conduce a la acción correcta
La Unakita aporta mensajes relacionados
con la búsqueda de equilibrio y por tanto dirigidos a solucionar
diferencias, bien sean diferencias energéticas en el propio cuerpo o
diferencias de cualquier naturaleza con otras personas.
Para la auto-ayuda no es un cristal
excesivamente conocido, y sin embargo sus propiedades son tan
importantes que debemos tenerla muy en cuenta. En concreto nos ayuda a
centrarnos en esas veces en las que nuestra mente está dispersa y
sentimos como un gran caos.
La unakita nos permita fusionar nuestros
aspectos más contradictorios para llegar a conclusiones importantes para
nosotros. Por eso, cuando nos sentimos perdidos nos muestra el camino
por el que debemos avanzar.
Su fuerza puede sernos muy útil cuando
queremos despejar el caos emocional que surge en la vida diaria o en un
momento determinado. Así cuando no tenemos muy claro si amamos o no
amamos a alguien, la Unakita nos da la respuesta. También nos aclara
cuáles son las sensaciones y emociones que estamos viviendo.
Su fuerza energética es suave y sutil,
pero muy eficaz. Para el espíritu puede ayudarnos a fusionar nuestros
tres cuerpos (emocional, físico y espiritual) en uno solo, para que el
equilibrio reine en nuestra vida.
En meditación puede revelarnos qué partes de nosotros mismos rechazamos y dónde está nuestro conflicto interior para liberarlo.
Tiene la fuerza de la unificación, así
que nos conviene cuando necesitamos reunir y recuperar nuestras energías
dispersas. Es un cristal fantástico para trabajar con el cuarto chakra.
También contribuye a equilibrar la falta
de hierro en la sangre; ayuda a concretar y meditar; realiza su aporte
en la concesión e integración.
Su energía es afín con los signos Aries, Leo y Sagitario
La unakita es eficaz en tratamientos del hígado y vesícula biliar, regeneración de tejidos y el sistema endocrino.
fuente: aqui
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