Es inevitable; a veces la vida no es como quisieras. Tu horario es un
desastre, no logras seguir tu rutina de ejercicios, alguien es malo
contigo; te sientes con ganas de dejar todo. Quieres acostarte y llorar.
La vida nos da golpes que nos dejan desalentados, enojados, frustrados,
deprimidos y vacíos. Una vez que estás en ese lugar, en un humor donde
simplemente ya no te importa nada, es difícil salir de ahí. Pero hay un
pequeño secreto para la felicidad y auto superación: todas esas cosas
sólo están en tu cabeza. Sí, tal vez no parezca que sea así. Parece que
todas las flechas de la vida están apuntadas hacia ti. Se siente como si
fueras un fracaso. Pero es verdad; todo está en tu mente. ¿Es correcto
trivializar cosas horribles que te pasan haciéndolas parecer simples
problemas mentales? Bueno, pues eso es lo que son, y una vez que te des
cuente de esto serás liberado. ¡Tienes el poder para cambiar tus
circunstancias! No es una tarea fácil, es realmente difícil. Cambiar tu
opinión y cambiar tu vida es un obstáculo mental digno de titanes, pero
puedes hacerlo. Todo lo que necesitas son algunos trucos mentales, y
mucha energía y voluntad para mantener tu mente abierta.
Pasos
- Apóyate en el poder de reemplazar pensamientos negativos con positivos.Cuando
no puedas verle el punto a algo o estés harto del sufrimiento que
implica dejar un mal hábito, puede ser fácil querer hundirte más en
negatividad. Pensar lo peor puede ser un hábito reconfortante, aunque no
te ayudará en nada. Nadie te está obligando a negar la realidad, pero
definitivamente puedes reconocer la negatividad como lo que es:
- Acepta que sólo son pensamientos negativos; no es quien tú eres o lo
que está destinado para ti. Simplemente es un conjunto de malos
pensamientos.
- Acepta los malos pensamientos directamente. Salúdalos casualmente,
como “Hola miedo de no hacer esto lo suficientemente bien; veo que estás
por aquí de nuevo”. Esto no es trivializarlos; es reconocer y nombrar
lo que tus emociones y sentimientos están creando en tu mente.
- Reemplaza esos pensamientos negativos con pensamientos positivos.
Por ejemplo, cuando estés ocupado diciéndote a ti mismo que no puedes
hacer algo di, “¡ALTO!”, y después di “¡Sí puedo hacerlo!”
- Detener el flujo de pensamientos negativos y reemplazarlos con
pensamientos más alegres también es un hábito. Aprender a hacerlo toma
un poco de tiempo pero vale la pena.
- Acepta el cliché de que tus fracasos son un escalón más hacia el éxito.
Es un cliché porque es verdad la mayoría de las veces. Sería difícil
encontrar a una persona que no haya fallado alguna vez, ¡aunque es muy
fácil encontrar a muchas personas que esconden este hecho! Todos pasan
por alguna falla, resbalón o equivocación de vez en cuando, no importa
qué tan expertos o inteligentes sean, o la experiencia que tengan. El
secreto está en dejar de tratar al fracaso como una razón para darse por
vencido o para decirte a ti mismo que nunca lo lograrás. El secreto
está en levantarte, sacudirte el polvo, tal vez tomar con humor lo que
ha pasado y empezar de nuevo (haciendo arreglos basados en lo que el
fracaso te enseñó que no debes repetir).
- El fracaso resalta los obstáculos, errores en el pensamiento y las
cosas que no funcionan. ¡Gracias al fracaso por mostrarnos el camino!
- El fracaso es un maestro sin remordimiento. Aprenderás cómo superar
esos obstáculos, mejorar tu pensamiento y a dejar de golpear tu cabeza
contra la pared.
- El fracaso te enseña lo que ganar significa para ti. Ganar en la
vida nunca es algo tan concreto como ganar una carrera. Ganar en la vida
es acerca de sentirte satisfecho, realizado y contento. Sólo tú puedes
ser el juez en estos estados. El fracaso te ayuda a notar la diferencia.
- Sé paciente. Cuando te frustras, cuando alguien está siendo
difícil, cuando empiezas a perder tu paciencia, practica la paciencia
cuando parece la cosa más difícil de hacer. Deja salir un poco tu
frustración acerca de cualquier cosa por la que estés pasando hablando
con un amigo, tu pareja o algún terapeuta. Evita dejar salir tu enojo;
el enojo es un efecto secundario de la frustración pero no es algo que
debas permitirte porque sólo empeora las cosas. La paciencia es el arte
de esperar, esperar los momentos malos y difíciles en tu vida para
resolverlos con y sin tu contribución. Reconocer que a veces la mejor
cosa que puedes hacer es hacerte hacia atrás y dejar que las cosas sigan
su curso, es igual de benéfico como saber cuando actuar para resolver
un problema. La paciencia te da el espacio para reconocer la mejor
manera de actuar.
- Escribe poemas para ti mismo, acerca de tu vida.
- Escribe un diario y explora tus sentimientos en él. Proyecta tus emociones negativas en un papel, no en otras personas.
- Trata la experiencia kármica que salió mal como una lección que va más allá del momento y que revela el carácter.
Recuerda que es bien sabido que la manera en la que reaccionas bajo
presión revela tu yo verdadero; esto es lo contrario a lo que la gente
dice “No era yo mismo porque estaba bajo mucho estrés”. Eres realmente
tú bajo presión, así que aprende las lecciones que tu yo mismo te reveló
y trabaja con las cosas que aún tengas que sobrellevar que te sigan
decepcionando.
- Aplica lo que estás experimentando y cómo le estás haciendo frente a
los eventos de tu vida en general. Averigua qué salió mal y por qué.
¿Cómo contribuiste a eso?
- ¿Cómo puedes cambiar lo que hiciste para que cuando algo similar
pase, reacciones de diferente manera? Las pruebas de carácter son buenas
y saludables para ti. Te motivan a alcanzar otro nivel, para ver si
puedes lograr el reto. Cada vez que intentes algo nuevo, velo como un
reto e intenta lograrlo. Y cuando lo hagas, te sentirás de maravilla
contigo mismo.
- ¿Necesitas ayuda con problemas específicos como el enojo, la
inhabilidad de contener la frustración o la tendencia de actuar
impetuosamente? Conseguir ayuda es una señal de fortaleza y quitarte ese
peso de encima mejorará tu karma dramáticamente.
- Si ves el aprendizaje como una cosa maravillosa, entonces puedes ver cada error como una bendición.
- Toma fortaleza de los eventos que sucedan a raíz del mal karma.
Las malas experiencias te fortalecen. Te hacen más fuerte para que
puedas mejorar cómo resuelves tus problemas, fortalecen tu habilidad
para ponerte de pie y fortalecen tu conocimiento, pero sólo si los
dejas. Podrías elegir ver los momentos de mal karma como si el mundo
estuviera en tu contra, o pensar que otras personas siempre se están
metiendo contigo, pero al hacerlo, le asignas tu responsabilidad de
cuidar de ti mismo a otros y dejas de hacerte responsable de responder
de una manera valiente y saludable a la gente y a tu comunidad.
-
- Los momentos difíciles nos mejoran cuando los atacamos con valentía y
paciencia. Nos sentimos menos fuera de control, menos a la merced de
los eventos de la vida cuando hacemos algo positivo para ayudarnos a
ponernos de pie.
- Mantente sereno y evita los pensamientos de venganza. Si
alguien te dijera que golpearon a una grapadora porque grapó su dedo, te
preguntarías en qué estaban pensando. Sin embargo la mezquinidad y
estupidez de este acto no es diferente de cuando hieres a alguien más
con tu ira, ya sea verbal, emocional o incluso física. No tenemos
derecho a perder nuestro temperamento y desquitarnos con otros seres;
cuando lo hacemos, perdemos nuestro respeto y continuamos un ciclo de
daño. Si alguien más te ha herido, no regreses el daño. En vez de eso:
-
- Sé más cuidadoso con sus motivaciones y actitud hacia ti pero no
busques herirlos. Encontrarán su propio karma a través de sus acciones
negativas, pero incluso eso no es algo que tú puedas decidir o de lo que
te debas preocupar.
- Haz un esfuerzo para suprimir tus deseos de venganza. Como con otros
pensamientos negativos, reconócelos cuando aparezcan en tu mente pero
déjalos ir una vez que los hayas reconocido.
- Busca intervención de una autoridad apropiada si lo que alguien más
te ha hecho es ilegal o inmoral. Siempre hay maneras seguras y prudentes
de lidiar con alguien que le está haciendo daño a otros de esta manera y
no debes hacerte la víctima o dejarlos.
- Algunas personas simplemente intentarán herirte mediante críticas,
apodos y sugerir que fallarás en lo que sea que intentes. Escucha el
mensaje debajo de lo que están diciendo, usualmente es “Yo quería ser
como tú/hacer lo que estás haciendo pero tengo demasiado miedo. Así que
me gustaría evitar que lo logres y por eso pienso que está bien
asustarte.” En otras palabras, aprende a oír el mensaje real y siente
compasión por su pérdida y no frustración por sus intentos de ponerte
obstáculos. Intenta agradecerles por su preocupación, haciéndoles saber
que tomarás sus consejos y déjalo así. En cuanto a los apodos, puedes
encontrar maneras cómicas de voltear la situación, reconociendo que tal
vez seas un poco “cabezón” o “flojo” pero que tienes maneras ingeniosas
para evitar arreglar eso.
- Evita usar una fuerza contra otra. Piensa “¿Si yo también actúo así,
dónde acabará?” y también recuerda que te estás rebajando a su nivel.
Supera la mezquinidad de otros y conviértete en un mejor ser humano.
- Ama a tu enemigo. Este es uno de los retos más grandes de la
vida. Cuando guardas tu enojo, odio o condescendencia hacia otro ser
humano, intenta cambiar las proyecciones negativas por amor. Si tienes
éxito, aunque sea un poco, te regocijarás en su éxito. El amor es una
cosa milagrosa; la única cosa que restaurará tu karma siempre.
fuente:
aqui
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.