LAS 38 FLORES DE BACH

A continuación una descripción breve y visual rápida de las 38 Flores de Bach, en la sección “Descripción de las Flores” están explicadas con mayor detenimiento ya que las propiedades de cada una de ellas son amplias. También se incluye una más “Lotus”, ya que armoniza e incrementa la acción del resto al ser añadida a cualquier mezcla.

Se escogen varias de estas flores para preparar una mezcla personal adecuada a cada problema, de una combinación adecuada dependerá el éxito de los resultados:

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Acebo (Holly): Facilita el entendimiento del amor, para los estados opuestos al amor: cólera, envidia, celos, ira, resentimiento. Cuando el desamor envenena los pensamientos.

Achicoria (Chicory): Para las personas excesivamente posesivas, dependencias emocionales. También para los que se sienten poco queridos. Estupenda para los niños que reclaman atención constante de forma directa o a través de pequeñas afecciones repetitivas.

Agrimonia (Agrimony): Sufrimiento y tortura interior que se esconde tras una apariencia indiferente o feliz. Para los problemas de auto-aceptación. Elimina las tensiones que suelen alentar a la auto-destrucción y tendencias al “escapismo” y a refugiarse en adicciones. Aceptación y reconocimiento.

Agua de Roca (Rock Water): Para los que son demasiado estrictos y rigurosos especialmente consigo mismos. Perfeccionistas y moralistas con predisposición al auto-castigo, auto-negación y represión a causa de sus ideas rígidas.

Álamo Temblón (Aspen): Miedos de origen desconocido: la muerte, lo sobrenatural, la oscuridad, presentimientos…. Muy útil en pesadillas y terrores nocturnos infantiles. Fobias.

Alerce (Larch): Sentimiento de inferioridad, falta de confianza en uno mismo. También para las personas que abandonan los proyectos antes de haberlos iniciado pues no se siente capaces de realizarlos. Para cualquier actitud negativa sobre la propia valía, temor al fracaso.

Aulaga (Gorse): Para el desaliento y la desesperanza profunda. Vencer las dificultades cuando parece que todo es en vano. Cuando se carece de fe o se están tentado a tirar la toalla. Levanta el ánimo en largas convalecencias y en dolencias crónicas.

Avena Silvestre (Wild Oat): Incertidumbre e insatisfacción de la propia vida. Personas que no saben definir ni canalizar sus ideales. Ayuda a discernir las metas de la vida, da claridad y lucidez mental. Estimula la búsqueda del propio camino.

Brezo (Heather): Para el egocentrismo. Personas que necesitan tener siempre cerca alguien que les escuche, siempre hablan de sí mismos y odian la soledad, “ladrones de energía”.

Brote de Castaño Blanco (White Chestnut): Dificultades de aprendizaje por falta de atención o deficiencias psíquicas. Muy útil para problemas que tenga que ver con el desarrollo y la madurez de todo orden. Estudiantes, exámenes, fracaso escolar.

Castaño Blanco (White Chestnut): Pensamientos repetitivos y parásitos, exceso de actividad mental, disco rallado. Para insomnios debidos a excesiva preocupación.

Castaño Dulce (Sweet Chestnut): Para quien se siente al límite de la resistencia física, psíquica o espiritual, “la noche oscura del alma”. Estados de extrema desesperación. Para cualquier situación terminal real o imaginaria. Gran ayuda en procesos de muerte.

Castaño Rojo (Red Chestnut): Para aquellas personas que se preocupan en exceso por los demás. De gran utilidad en lugares plagados de preocupación colectiva como clínicas, hospitales, consultas…ect).

Centaura (Centaury): Cuando no se sabe decir “no”. Personas serviles con miedo a no ser aceptados. Cuando exista dependencia emocional de cualquier tipo. Para los que se dejan avasallar, refuerza la autoestima. Eficaz en estados de decaimiento general. Ayuda en la recuperación de enfermedades, sobre todo en animales.

Cerasifera (Cherry Plum): Miedo a hundirse, a perder el control, a perder la razón o el conocimiento. Miedos a incontinencias o pérdidas involuntarias como la de orina, eyaculación precoz, tics nerviosos, pérdida de cabello, incapacidad motriz..etc.

Ceratostigma (Cerato): Para los que necesitan la opinión de los demás pues no confían en su propio juicio. Ayuda a escuchar la “voz interior” y a revalorizarse adecuadamente.

Clematide (Clematis): Personas excesivamente soñadoras, ayuda a poner los pies en la tierra. Cuando exista demasiada ensoñación e inconsciencia; niños que están “en las nubes”, dificultad de concentración.

Estrella de Belén (Star of Bethlehem): Casos de trauma o shock, tanto si es pasado o en previsión futura –ir al dentista, cirugías, etc..- Equilibra y tranquiliza ayudando a que no se llegue a somatizar el shock.

Genciana (Gentian): Ayuda a superar la tristeza y el estado de desánimo, cuando éstos son debidos a causa conocidas. Anima y da confianza en el futuro. En tristezas de tipo “exógeno”. Devuelve la alegría y la esperanza.

Haya (Beech): Para los que se creen en posesión de la verdad, personas críticas e intolerantes. Temperamentos obstinados y dogmáticos, sin capacidad de flexibilidad con los demás. Cuando solamente se ve “la paja en el ojo ajeno”. Alivia el exceso de tensión física y emocional.

Heliantemo (Rock Rose): En casos de miedo extremo. Temor exagerado a la muerte, terror, pánico. Temores profundamente anclados en la subconsciente. Mejora las crisis de angustia y ansiedad. Preventivo frente a conflictos repetitivos de pánico.

Hojarazo (Hornbeam): Cansancio continuo, cuando el origen es psicológico. Cuando es toda una hazaña levantarse a diario y comenzar las tareas cotidianas. Fatiga mental.

Impaciencia (Impatiens): Personas impacientes que no suelen respetar el curso natural de los acontecimientos y odian la rutina, siempre tienen prisa y todo les parece lento. Útil en emociones o situaciones que aparezcan repentinamente o de forma explosiva (colitis, vómitos, ira…etc).

Lotus (Lotus): Esencia floral universal, armoniza todos los niveles sutiles. Favorece el anhelo espiritual, para los bloqueos energéticos. Muy útil en meditación. Se aconseja añadir a toda mezcla de esencias pues la armoniza e incrementa su nivel vibratorio.

Madreselva (Honeysuckle): En la nostalgia. Para las personas que viven en el pasado. Ayuda en problemas emocionales propios de la senilidad o conflictos que “amarren al pasado”. Muy útil en el entendimiento y aceptación de las enfermedades congénitas.

Manzano Silvestre (Crab Apple): Sensación de impureza o suciedad, física o emocional. Para los que se siente manchados por ideas, sentimientos, enfermedades o apareciencia física. Los excesivamente escrupulosos. Purificación o desinfección emocional, por lo tanto perfecto para las separaciones afectivas.

Mimulo (Mimulo): Temores de origen y causa conocida: enfermedad, pérdidas, animales, dolor… Para las personas sensibles y demasiado tímidas. Útil en rehabilitaciones cuando se tiene miedo al dolor que puede producir el movimiento.

Mostaza (Mustard): Desánimo y abatimiento de tipo “endógeno”. Tristeza y desaliento sin causa conocida. También para las personas inmersas en una gran transformación interior o espiritual.

Nogal (Walnut): Armonización emocional en todo aquello que implique cambio: país, trabajo, boda, dentición, pubertad, menopausia, separaciones… etc. Ayuda a reubicarse y “cortar marras” que imposibilitan el cambio. También es útil frente a influencias externas negativas (malas compañías).

Olivo (Olive): Cuando se cree haber llegado al límite del cansancio y agotamiento físico y psíquico. Ayuda a recobrar ánimo y fuerza. Para situaciones de desgaste moral y anímico. Procesos de recuperación y desvitalizaciones crónicas.

Olmo Blanco (Elm): Si la persona se siente abruma y sobrepasada por las responsabilidades cotidianas, por el dolor. En cualquier proceso en el que intervenga el sentimiento de agobio, de no poder con todo.

Pino Silvestre (Wild Rose): Sentimiento de culpa, reproches continuos sobre actos pasados. Ayuda a encontrar la propia ética y auto-aceptación.

Roble (Oak): Ayuda a recuperarse tras un gran esfuerzo. El remedio para los adictos al trabajo cuando pierden el sentido de la proporción de las fuerzas y llegan al agotamiento. En tensiones por exceso de trabajo o abatimiento por esfuerzo físico.

Rosa Silvestre (Wild Rose): Apatía y resignación. Sensación de “atascamiento”, dificultad para avanzar en la vida. Ayuda en la transformación interna ante los cambios importantes de la vida. Proporciona alegría de vivir. Útil en la desgana sexual.

Sauce (Willow): Para la amargura y el resentimiento. Aquellos que se siente perseguidos por el resto del mundo y responsabilizan a otros de todo lo que les sucede. En cualquier proceso asociado a la rabia.

Sclerantus (Sclerantus): Para aquellos que son incapaces de decidir y aún haciéndolo siempre dudan. En desequilibrios emocionales asociados a pérdida de ritmo, ciclo o frecuencia (reglas irregulares, descompensaciones circulatorias…etc..)

Verbena (Vervain): Equilibra el exceso de entusiasmo. Para los extremistas o fanáticos que creen estar siempre en posesión de la verdad e intentan arrastrar a los demás. Los excesivamente vehementes que quieren cambiar el mundo. Atolondramiento y precipitación.

Vid (Vine): Personas dominantes, autoritarias, inflexibles que quieren imponerse siempre a todo y a todos, tengan o no razón. Ayuda a utilizar las posibles cualidades de liderazgo de una forma constructiva.

Violeta de Agua (Water Violet): Para los que se sienten superiores a los demás y se mantienen a distancia para “no mancharse”. Aquellos distintos o distantes. Ayuda en la comprensión de la humildad y el entendimiento del propósito de las cosas. Favorece la apertura espiritual y suaviza el temperamento.

 

fuente: aqui