La damiana y sus propiedades afrodisiacas

Es un arbusto mediano que crece de forma natural en zonas áridas del trópico americano, en especial dentro de México, Bolivia, Brasil y el suroest e de Estados Unidos.

Las antiguos habitantes de estas zonas la incluían en rituales de fertilidad; posteriormente, los e tnobotánicos confirmaran sus propiedades, bautizándola con el nombre de Turnera Difusa o Turnera Aphrodisiaca, en honor a su virtud de aumentar el deseo sexual.

De efecto rápido y efectivo, la damiana actúa sobre el sistema nervioso central, estimulando el aparato genitourinario.
Esto se traduce en una mayor sensibilidad genital tanto en hombres como en mujeres. Igualmente, produce un efecto vigorizante y desinhibidor que ayuda a quienes la consumen a liberarse de represiones morales o psicológicas.

Además de su función como afrodisíaco, la damiana está indicada en casos de impotencia, falta de interés sexual, vaginismo, eyaculación precoz y otras disfunciones de origen psicológico.

Se sabe también que eleva la cantidad y calidad espermática en los hombres y funciona como regulador hormonal en las mujeres.

La damiana posee propiedades diuréticas y bactericidas que, en conjunto con su capacidad de actuar sobre los centros espinales, hacen de ella un excelente remedio para tratar dolencias del aparato urinario. Asimismo, su consumo promueve una generosa dosis de energía y buen humor, ideal para revitalizar al organismo en casos de fatiga, debilidad corporal o depresiones leves.

De la damiana se consumen las hojas en forma de infusión. Éstas pueden encontrarse a la venta en tiendas herbolarias. A las dosis indicadas no se les conoce ningún tipo de efecto secundario. Sin embargo, está contraindicada en personas con problemas de riñón, insomnio, ansiedad y durante el embarazo o lactancia.

Infusión afrodisíaca de damiana
Hervir de 10 a 15 gr. de hojas de damiana, dejar reposar durante 15 min. y colar. Tomar de 20 a 30 min. antes de la relación sexual. Para contrarrestar su sabor amargo, se recomienda diluir en agua o endulzar con un poco de miel.

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